El fotógrafo británico Will Burrard-Lucas logró registrar en Kenia al leopardo negro, mediante una serie de trampas con las que atrajo al extraño mamífero.
El fotógrafo de 35 años logró captar las imágenes, luego de instalar equipos especializados que incluían sensores de movimiento inalámbricos, cámaras DSLR de alta calidad y varios ‘flashes’.
“¡Qué animal impresionante!”, dijo Burrard-Lucas en Twitter, donde compartió algunas de sus fotografías.
De acuerdo con National Geographic, esta especie se distingue por el melanismo, una condición opuesta al albinismo, y esto es “el resultado de un gen que causa un exceso de pigmento en la piel o el cabello de un animal para que aparezca negro”.
Por su parte, Vincent Naude, coordinador del proyecto de investigación forense genética del leopardo de la organización sin ánimo de lucro Panthera, explicó a NatGeo que el leopardo negro es noctámbulo, lo que sumado a sus muy atípicas apariciones, hace que sea realmente complicado conseguir una buena fotografía.