La crisis del coronavirus, que ya ha venido afectando fuertemente al empleo en Santa Marta, se está empezando a evidenciar ahora con el cierre intempestivo de reconocidos establecimientos que, hasta hace cinco meses, eran un emblema para la ciudad de Santa Marta por su trayectoria y reconocimiento.
Un ejemplo es el restaurante Josefina, que hace apenas un año celebraba por haber sido merecedor del premio al mejor restaurante de Cocina Tradicional Caribe que entrega la revista gastronómica La Barra.
Pero hasta los mejores restaurantes están padeciendo los embates económicos de la pandemia, agudizados por las medidas nacionales para contener la propagación del virus, que han implicado el cierre de restaurantes y otros establecimientos durante cerca de cinco meses, limitando únicamente al envío de domicilios.
Esto llevó a muchos restaurantes a bajar sus ventas hasta en un 90%, lo que los ha llevado a una inminente crisis.
En el caso del reconocido restaurante Josefina, sus propietarios anunciaron que “estamos trabajando en un nuevo concepto más flexible”, sobre el cual estarán haciendo anuncios próximamente.
El martes, los propietarios del restaurante Burukuka también anunciaron su cierre, lo que afectó el trabajo de 50 familias que trabajaban para el reconocido establecimiento.
Alfonso Lastra, presidente de la Cámara de Comercio de Santa Marta, lamentó la situación que se ha venido presentando con los establecimientos y manifestó que desde la Cámara se habilitó la Hoja de Ruta Magdalena Avanza, una estrategia en conjunto con otros estamentos, incluyendo el nivel nacional, para reactivar la economía de la región.
“Esperemos propuesta de la Gobernación, la Alcaldía y municipios del Magdalena. Lo importante es la unión de esfuerzos”, mencionó Lastra.